Un estudio de la Universidad de Kyoto, Japón, demostró que los perritos pueden entender cuando alguien ha sido desagradable con su familia humana. Los resultados demuestran que, dependiendo de la situación, estos animales pueden cambiar drásticamente su actitud hacia una persona.
El estudio titulado ‘Evaluaciones sociales de humanos por parte de monos y perros’, fue publicado en noviembre de 2017 por la revista Neuroscience & Biobehavioral, demostró que los perros no son observadores pasivos y que “reflejan un fuerte interés” por la comunicación e interacción que hay entre humanos, y que son capaces de modificar su comportamiento según la situación lo requiera.
Para demostrar su hipótesis, los investigadores reunieron perros junto a sus padres humanos y voluntarios desconocidos. A un grupo se le pidió ser amable y a otro comportarse de forma agresiva.
Luego del experimento, ambos grupos de desconocidos le ofrecieron comida a las mascotas para registrar su reacción. Los perritos aceptaron sin problemas el alimento de los voluntarios amables y fueron hostiles con los agresivos.