Por primera vez en la historia del Perú, tenemos una primera dama que – a un año de asumir el poder- estaría impedida de salir del país por órdenes de la fiscalía. Lilian Paredes, sus hermanos y su esposo, Pedro Castillo, forman parte de una organización criminal según las evidencias, depósitos, testimonios y pruebas presentadas por colaboradores eficaces que fungieron de testaferros para hacerse de obras públicas y robar el dinero del Estado.
“No más pobres en mi familia, habiendo un país rico al cual saquear”, publicó la reconocida periodista Claudia Toro.